De paradojas y utopías Portada 

Municipios bajo la lupa

“He oído decir que son hábiles para robar los fondos públicos,
y los mejores ladrones son considerados dignos de mandar”
Jenofonte, Anábasis, Libro IV, 16, p. 143

1).- ¿Municipio libre?

La atomizada estructura municipal oaxaqueña es única en el país. Casi la cuarta parte nacional. Territorios casi fantasmales como Magdalena Jicotlán, distrito de Coixtlahuaca, hasta asentamientos populosos como Santa Cruz Xoxocotlán. Pero todos reciben recursos, participaciones y fondos federales. De los 570 –todo el mundo lo sabe- 153 se rigen por el sistema de partidos políticos, los 417 restantes por sistemas normativos indígenas. Antes se llamaban “usos y costumbres”. Más bien, abusos y costumbres. Partidos y organizaciones sociales siempre han metido la mano. Asambleas sesgadas, grupos delincuenciales a fondo. Si alguien lo duda pregúntenle a los eternos agitadores de San Juan Mazatlán, Mixe o San Juan Cotzocón. Pero no son los únicos. La maña está hasta en las alcantarillas.

2).- Territorios sin ley

Las cuotas de poder en los municipios han sido históricas. Gobernadores, funcionarios, dirigentes de partido, la “familia real”, diputados (as), factureros (as), sindicatos mafiosos y –obvio- los grupos delictivos que imponen o financian a candidatos, tienen mano. Y cobran derecho de piso. Van sobre ciertos espacios donde fluyen la lana y las complicidades: regidurías de Hacienda, Obras Públicas, Tesorería y, particularmente, la Policía Municipal. Con la “Operación Enjambre” en el Estado de México no se descubrió el hilo negro. Los grupos criminales jamás hubieran permeado por todo el país sin la connivencia de las autoridades y las corporaciones policiales. Los jefes simplemente dejan hacer, dejan pasar.

Algunos nuevos ediles, como el de Miahuatlán de Porfirio Díaz, César Figueroa, a) El Chivo –hoy en medios nacionales por su aberrante manejo de la basura- afirmó en entrevista que la policía municipal de su antencesor iba de la mano con la delincuencia. Pero los señalamientos de enriquecimiento inexplicable hacia él, son un secreto a voces entre los miahuatecos. Sería una tarea titánica analizar caso por caso. En decenas, hay una cloaca de adeudos y nexos ilícitos. A ediles con carpetas abiertas la FGEO ya se las dejó caer: Huautla y Ocotepec, Mixe. Muchos ni hicieron la entrega-recepción. Otros más, ni castos ni puros, con policía municipal que no sirve a la ciudadanía sino para cuidar sus negocios turbios o proteger a sus familias. Ahí están algunos municipios limítrofes con Chiapas.

3).- Los grandes proyectos

El gobierno de Salomón Jara y quien coordina los trabajos por parte de su administración, José Antonio Estefan Garfias, no deben perder de vista los municipios que se ubican en la ruta del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT). Ahí están Asunción Ixtaltepec –tierra de los afectos de Jara-, Santa María y Santo Domingo Petapa, Barrio de la Soledad y Matías Romero, que han sido un matadero cotidano.

Tienen el control los grupos delictivos dedicados al huachicol, secuestro, extorsión, tráfico de migrantes y estupefacientes. También los sindicatos mafiosos –así les llamó el Mesías-. ¿Y qué de uno de los municipios que está arriba o al nivel de Culiacán y sus sindicaturas? El más violento del estado: Juchitán de Zaragoza. Hay que emplazar a sus protectores políticos en el gobierno estatal a dejar el cargo o seguirán metiendo a la Primavera Oaxaqueña en problemas y en la mira del diario oficial de la 4T: La Jornada, que ha golpeado un día y otro también.

Echar andar el proyecto hidráulico “Paso Ancho”, para surtir de agua potable a la Zona Metropolitana de Oaxaca de Juárez, no será tarea fácil del nuevo titular de la Secretaría de las Infraestructuras y Comunicaciones. El tapón lo tendrá en San Vicente Coatlán, un municipio históricamente conflictivo y perpetuamente violento. Ahí la muerte tiene permiso. Tiene historia. Candidatos de Morena y comitiva o policías estatales han sido masacrados en los últimos años. Además –cuestión de recordar- fue uno de los obstáculos en la carretera Barranca Larga-Ventanilla. A los chenteños les gusta bailar no al tenor del machete chunco, sino de las balas y las ejecuciones.

BREVES DE LA GRILLA LOCAL:

— Consulta obligada sobre el tema educativo oaxaqueño y otros temas más, es Samael Hernández Ruiz. Hombre de izquierda, no fanático. Crítico, investigador, bohemio y amigo desde hace algunos ayeres. Ya está disponible su más reciente obra: Crónicas de la memoria. Por cierto, de buena madera juchiteca, se recupera favorablemente de un tema de salud. ¡Mi reconocimiento a Sam! 

— Mi amigo, periodista, escritor e investigador, Claudio Sánchez Islas, además de gran editor y fotógrafo, recibió ayer la medalla “Ricardo Muñoz Zurita”. Se trata de un galardón para reconocerle su aportación a la investigación sobre la gastronomía, en la que el premiado se ha sumergido durante años y que ha dado lugar a varias obras, entre ellas: Historia y gastronomía de la ciudad de Oaxaca, Tomos I y II, Carteles Editores, 2023. ¡Enhorabuena Clovis! 

— En favor de una urgente coordinación de esfuerzos entre sociedad civil y gobierno, para la salvaguarda del Centro Histórico, se pronunciaron la Asociación de Empresarios y Ejecutivos de Oaxaca, que preside Carlos Luis Valle y el regidor capitalino, Antonio Álvarez Martínez. Buen ejercicio de sensibilidad política del ex diputado local.

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