“Paso Ancho”: Disputa añeja y mortal

En pleno auge del gobierno de la alternancia, cuando la SEMARNAT publicó en su página de internet la suspensión de los trabajos en la presa “Paso Ancho”, por problemas inherentes al impacto ambiental, el ex titular de la Secretaría de las Infraestructuras y Ordenamiento Territorial Sustentable (SINFRA) –hoy en la mira de la Secretaría de la Contraloría- NETZAHUALCÓTL SALVATIERRA, montó en cólera. Una y otra vez desmintió la especie, a pesar de las pruebas fehacientes de que el mega proyecto hidráulico –sin eufemismo- estaba haciendo agua. No obstante la exhibida que les puso a NETZA y otros funcionarios, el delegado de PROFEPA, NEREO GARCÍA, frente al gobernador GABINO CUÉ, con un contundente: “no engañen al gobernador”, los supuestos trabajos en la presa continuaban.

A menudo se abordaban los problemas ambientales, de fallas en el cumplimiento a la normatividad vigente y los problemas financieros que ya padecía la empresa TRADECO, S.A. de C.V.. Poco se atendía el asunto agrario que libran desde hace mucho, San Vicente Coatlán, perteneciente al distrito de Ejutla y Sola de Vega. Desde hace años, dichas comunidades velan armas y no precisamente por los escurrimientos de agua que según la CONAGUA podrían abastecer de agua potable a la capital oaxaqueña y el área conurbada, por al menos tres o cuatro décadas, sino por algo más rentable: los cultivos ilícitos que todo mundo –salvo tal vez la miopía de las autoridades se niegan a ver- que ahí prevalecen.

La prueba más dolorosa de ese añejo conflicto se dio ayer domingo en la madrugada, cuando una camioneta “Nissan”, doble cabina, de servicio mixto, fue emboscada en el paraje “La Pihua”, perteneciente a “Paso Ancho”, por un grupo armado, con un saldo mortal de cuatro muertos, entre ellos dos mujeres y una recién nacida, así como dos lesionados. Se trata, sin duda alguna, sin adelantar vísperas, habida cuenta de que la investigación la tiene en sus manos el Fiscal General, JOAQUIN CARRILLO RUIZ, de un problema grave que ha enfrentado a ambas comunidades: San Vicente Coatlán y Sola de Vega, que subyace en otro eje del abortado proyecto hidráulico “Pacho Ancho”. Ambas comunidades libran rencillas añejas, en las que mucho tienen que ver la falta de atención y vigilancia por parte de la Policía Estatal y las medidas adecuadas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), a cargo de JORGE RUIZ MARTÍNEZ.

Sin embargo, se trata asimismo de uno de los hechos de sangre que prácticamente le dan la bienvenida al recién ungido Secretario General de Gobierno, CARLOS SANTIAGO CARRASCO, que tendrá que echar mano de sus conocimientos para saber exactamente quiénes fueron los agresores y criminales. No se trata hoy de mesas de negociación complacientes ni, mucho menos de ficticios acuerdos de paz, sino de aplicar la ley y castigar a los autores materiales e intelectuales. (JPA)