S-22: Oportunismo y demagogia

RAÚL NATHÁN PÉREZ

“Incluso estéril, la villanía hace escuela”
Tácito, Historias, Libro IV, 42, p. 265

1).- Breve repaso histórico

De la política acomodaticia y pseudo radical de la llamada Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y más de los latrocinios del Cártel 22, se ha escrito mucho. Hacerlo desde la visión académica es una cosa. Pero, emprenderlo desde las propias vivencias es otro boleto. Combinar ambas puede ser un ejercicio interesante. Eje importante en la conformación de la disidencia magisterial en 1980 fueron mentores egresados de las Escuelas Normales Rurales. En el discurso, la consigna callejera y el quid ideológico, son más que evidentes las “enseñanzas” de los Clubes de Orientación Política e Ideológica (COPIs) que, en todo el sistema de normales rurales ha operado quien mantiene el control del alumnado: la Federación de Estudiantes Campesinos, Socialistas de México –la FECSM-.

Ese esquema, vigente desde los años 60-70 del Siglo XX, ha seguido permeando en la llamada “lucha magisterial”. Los patrones ideológicos son exactamente los mismos. Un marxismo acartonado, refrito de los textos de Editorial Progreso de Moscú, de aquellos años. Clásico: El poema pedagógico de A. Makarenko. Además de algunos chispazos de maoísmo y de la teoría revolucionaria de V. I. Lenin plasmada en el “¿Qué hacer?”. A sus consignas se incorporó el “¡Venceremos!”, del movimiento chileno de Salvador Allende de los 70s. Es decir, hay un estancamiento en lo que se refiere a ideas de más de medio siglo. Nuestros aguerridos mentores han arrastrado dogmas, doctrinas y afanes de la guerrilla urbana –sólo en sus peroratas callejeras- de la obra de Carlos Marighella: Teoría y praxis revolucionarias. Muchos se asumen Lucio Cabañas y los hay, como la Unión de Trabajadores de la Educación –UTE- que llevan en las marchas figuras de Marx, Lenin y ¡Stalin!

2).- Cambio de capataz 

En 1980 el objetivo de la CNTE fue demoler a “Vanguardia Revolucionaria”, ligada al PRI, liderada por Carlos Jonguitud Barrios y, posteriormente, por Elba Esther Gordillo. Cuajó en pocos estados del país. Oaxaca fue uno de ellos. Pero se instauró una nueva dictadura. Ni libre afiliación, ni disidencia, menos autocrítica. Los grupos y tribus del Cártel 22 se han repartido el pastel. Y desde octubre de 1992, cuando el ex gobernador Heladio Ramírez les entregó el IEEPO, manipularon a placer plazas, nómina y cambios de adscripción, hasta julio de 2015, cuando la Federación recuperó el control. El Cártel 22 –así llamado por su perfil cuasi delictivo- era trabajador y patrón; juez y parte. Llenó de incondicionales todo el sistema educativo. Su sistema de premios y castigos ha ido en función de la incondicionalidad y el activismo. Ni experiencia docente, menos formación profesional.

Cada mes de mayo la misma película. Marchas, paros y plantones. Su movilización sólo ha generado repudio social. En 2006, el dirigente Enrique Rueda Pacheco y secuaces actuaron como mercenarios. Colapsaron la economía y la paz social, luego del fallido desalojo que operaron funcionarios del gobierno de Ulises Ruiz. El Movimiento Democrático de los Trabajadores de la Educación –MDTEO- sirvió a patrones priistas. Se prostituyó. Carretadas de dinero han circulado por debajo del agua. Y hasta cargos políticos. Este ha sido el quid del movimiento, no otro. Sus dirigentes se vendieron como viles mercenarios a gobiernos priistas, pero hoy son abanderados de Morena. Ahí están el huarachón, Azael Santiago Chepi, Irán Santiago Manuel y Aciel Sibaja que, como diputados federales, para los oaxaqueños, sólo ha sido una tríada inútil, facciosa y convenenciera.

3).- Los nuevos íconos de “la revolución”

Después de 4 años de calma chicha, en virtud de la simbiosis entre el gobierno priista de Alejandro Murat y “Los Pozoleros”, encabezados por Eloy López Hernández –egresado de la Normal Rural de Ayotzinapa-, arribó Yenny Aracely Pérez Martínez –ex alumna de la Normal Rural “Vanguardia” de Tamazulápan del Progreso-. El discurso conciliador devino temerario, desafiante, demagógico. Más de 4 mil millones de pesos les ha entregado el IEEPO, manejado por el Cártel teco de Emilio Montero y secuaces. El gobierno de Salomón Jara les ha resuelto un sinfín de demandas.

La CNTE es un sector marginal del magisterio del país. Y la S-22 el más acomodaticio y oportunista de sus miembros. Con su trillada fórmula de movilización-negociación-movilización busca más privilegios. El rezago educativo de más de 4 décadas le viene valiendo gorro. Ya le asestó dos golpes a la educación oaxaqueña: los paros de 48 y 72 horas. Y la estocada fatal: su paro indefinido. Pero presta para chutarse el 10% de incremento salarial que autorizó el gobierno federal y las dádivas que obtengan de la extorsión a la Primavera Oaxaqueña.

BREVES DE LA GRILLA LOCAL:

— Pese a los claroscuros que permean en la elección judicial, hay que reconocer que una de las únicas caras visibles que ha buscado el voto ciudadano, cumpliendo con las restricciones impuestas por el INE, es la magistrada en funciones, Adriana Ramos León. Con 27 años de servicio y probada carrera en el Poder Judicial de la Federación, se verá en las boletas para las magistraturas administrativa y civil, con aspirantes a las que así, literal, no le llegan ni a los talones.

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