De paradojas y utopías 

Morena: El neo Cesarismo

“No hay más que un dueño, no hay más que un rey”
Suetonio, “Cayo Calígula”, Los doce césares, p. 94
A Toño Sumano, por la pérdida de su señora madre

1).- CDMX, lectura irrefutable

La imposición de Clara Brugada por encima de Omar García Harfuch, como candidata al gobierno de la CDMX, muestra una doble realidad. Una: en el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), las encuestas son artificio y simulación y dos: en candidaturas, el que palomea vive en Palacio Nacional. AMLO está ejerciendo un nuevo cesarismo a punto de terminar su período. Quiere perpetuarse con los favores de quienes llegarán al Congreso y algunas gubernaturas. Se la van a deber. En Veracruz y Tabasco afianzó a sus leales: Rocío Nahle y Javier May. En Puebla se la cobró a Ignacio Mier y va el pariente de éste, Alejandro Armenta. Ambos, de hierro priista reciente.

En la capital del país le dio una pequeña lección del Maximato que trae entre manos, a su corcholata favorita, Claudia Sheinbaum: nadie va a saltarse las trancas. Hay un jefe político que lo mismo manotea que desacredita; finge soltar los hilos y da bastones de mando que arrebata. Ante esta realidad, algunos que durante un tiempo se maquillaron de tricolor, como Alejandro Murat, de pronto tiran la máscara y se ponen en la fila para ser tomados en cuenta. El miedo a la venganza de AMLO doblegó a Marcelo Ebrard. Pero, ¿cuál es la lectura para los gobernadores (as), específicamente para Salomón Jara, que al menos ya tiene dos de sus cartas de mayor cercanía en plena precampaña: Laura Estrada y Antonino Morales? Lo grave es que ninguno levanta pese a una sofocante publicidad.

2).- Los jaloneos que vienen

Como observadores de la vida política –que no clarividentes ni pitonisos- advertimos jaloneos y tirones en la definición de las próximas candidaturas. En Morena y aliados, más que en los partidos que conforman el Frente Amplio por México (FAM). Aquí no hay “lo que diga mi dedito”. En el partido marrón sí. Para colar a sus leales en senadurías o diputaciones federales, Jara debe meterse a fondo y negociar. No soslayar a quienes prevalecen en los afectos de AMLO, como Adelfo Regino o, a pesar de su cuestionable desempeño, Nancy Ortiz. Pueden irse poniendo en la cola, aquellos (as) que en público o en privado, hicieron votos por “es Claudia”. Y más atrás las y los colados y solovinos del PRI, que apenas se pusieron la camiseta. Hay que esperar a que la que la recién desposada Sheinbaum, se recupere del revés que le propinó su guía moral. En un territorio chairo como es Oaxaca, el peor gana. Por eso, todos (as) quieren.

El jefe de facto de Morena en Oaxaca es Jara Cruz. Es lección indiscutible en nuestro sistema político. Desde ahí debe marcar la pauta para que sus colaboradores (as) actúen con prudencia. Y no se calienten los granizos. Habrá mayor margen para las diputaciones locales y municipios. En el de Oaxaca de Juárez ya se están dando hasta con la cubeta. El edil en funciones, Francisco Martínez Neri, que con todos sus negativos pretende reelegirse versus Luis Alfonso Silva Romo, “El zar del acarreo”, que busca entrar con calzador, apuntalado por su manager, Noé Jara. ¿Y las mujeres, Liz Arroyo, Haydeé Reyes o Gabriela Elvia Pérez del PVEM?

Por lo pronto, se sabe, Neri ya se inscribió para otras candidaturas, a ver si es chicle y pega. Sin embargo, en esta parafernalia de precampañas, lo único que se ha logrado hasta hoy, es abrir la puerta a quienes postulen los partidos que conforman el FAM, sobre todo un candidato ciudadano. Dos períodos de Morena en la capital han sido un lastre. Pero no hay que olvidar que en nuestro medio es tal la sumisión inconsciente o fijación a un partido, que la mediocridad e ineficiencia tienen premio. Es la bajeza de nuestra política aldeana.

3).- A tejer fino

Hay pues en el ambiente de Morena, fricciones y fracturas. Y se anticipan más. Sobre todo, por el temor a que, bien apuntalados en la cúpula, arribistas y oportunistas se impongan sobre los que sí han hecho talacha en Morena. Por ello, no se puede hablar de un partido unido y homogéneo. Existen, además, otros personajes que giran como satélites haciendo votos por la 4T, como Benjamín R0bles, dueño de la franquicia, Partido del Trabajo (PT), pese a la fractura del mismo en dos facciones: la de “The Dirty Face” y la que mantiene la dupla y ex pareja, Lenin López Nelio-María de los Ángeles Vásquez Ruiz. ¿Y qué decir de esa feria de vanidades que es el partido verde? Eso será otro capítulo. Ir solos –en diputaciones federales o locales- los dejará en su triste realidad: partidos morralla y acomodaticios. 

BREVES DE LA GRILLA LOCAL:

— ¡Vaya sainete el del Cártel 22, el pasado 15 de noviembre! Se trata de la reedición de la violencia, el manipuleo y la mediocridad del magisterio. De poco ha servido la política de diálogo del régimen de la Primavera Oaxaqueña. Los parásitos de la educación cada vez exigen más. Incidencias, bilateralidad y demás argumentos son sólo la máscara para devenir un poder fáctico, al mando de la radical Jeny Aracely Pérez Martínez y sus lacayos. Quieren lana. Ése es el quid de sus locuras y erigirse en los capos de la educación pública.

Consulte nuestra página: www.oaxpress.info y www.facebook.com/oaxpress.oficial Twitter: @nathanoax      

Leave a Comment