El PAN y sus incongruencias
Hay términos que la quedan a la perfección a la clase política oaxaqueña: oportunismo e incongruencia. Y ello se puede aplicar a algunos militantes del Partido Acción Nacional (PAN), que dirige en la entidad, JUAN MENDOZA REYES. Nos referimos a dos de la diputadas que hace algunos meses cuando la LXII Legislatura local autorizó al gobernador GABINO CUÉ, a contratar deuda pública, fueron al DF a pedir al intervención de su partido ante lo que ellas consideraron un agravio de sus colegas del PRI al pueblo oaxaqueño. Nos referimos a LESLIE JIMÉNEZ VALENCIA y ALEJANDRA GARCÍA MORLÁN, que en la pasada sesión se mostraron no sólo complacientes con apelar a los fondos de infraestructura educativa que anunció el titular de la SEP, AURELIO NUÑO MAYER, sino más bien melosas.
Se sabe que el PAN se ha distanciado del ejecutivo estatal, o más bien, que ha ido dando bandazos. Por ejemplo, cuando CUÉ MONTEAGUDO mandó traer a dirigente y legisladores para apoyar su propuesta de que FRANCISCO ÁLVAREZ FIGUEROA, presidiera el Instituto de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, se mostraron renuentes. Sólo accedieron cuando ESTEBAN ORTIZ RODEA fue designado casi fast track, Contralor del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (IEEPCO). En torno a la Ley de Deuda Pública, aprobada hace un par de días, no hay duda que las voces panistas asumieron como un hecho el abominable “pago por evento”.
Hay que recordar el jaloneo que se dio entre los diputados cuando se aprobó –con un inusual desaseo- la Reforma Político Electoral, que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), echó para atrás, pero cuya aprobación contó prácticamente con la simpatía de la coordinadora del blanquiazul en el Congreso local: ANTONIA NATIVIDAD DÍAZ JIMÉNEZ, aquella que propuso que la salchicha de Ejutla, se propusiera como Patrimonio Cultural de la Humanidad. No legislan, más bien simulan que lo hacen, pues nadie ignora que la LXIII Legislatura pasará a la historia como la peor de cuantas hayan representado la voluntad popular de los oaxaqueños. Si la anterior salió exhibida por la corrupción y los compromisos con el ejecutivo, ésta será un ícono para las generaciones del futuro, de lo que no debe hacerse. Al menos los resultados que presenta MENDOZA REYES, a sus dirigentes nacionales, es de un partido que está a la cola de las preferencias electorales, precisamente por el oportunismo e incongruencia de sus cuadros. (JPA)