UABJO: Como pila de agua bendita

POLÍTICA DE SUMA CERO

Es impresionante la presión que ejerce esa caterva de parásitos enquistados en algunos sindicatos como el de Trabajadores y Empleados de la Universidad Autónoma “Benito Juárez de Oaxaca” (STEUABJO), que lidera FERNANDO DAVID CRUZ LÓPEZ, el mismo que –ha trascendido- es manipulado por el ex diputado del PRD, FRANCISCO MARTÍNEZ NERI. Desde el pasado miércoles por la noche se escucharon los tambores de guerra de dicho sujeto, que cobra en el gobierno estatal, para la toma de Ciudad Universitaria ayer, desde primera hora.

A juicio de conocedores de la problemática de nuestra Alma Mater, el rector EDUARDO BAUTISTA MARTÍNEZ ha abierto las puertas para encontrar una solución a las exigencias tanto del STEUABJO como de otros gremios, los cuales ahorcan materialmente a la institución con demandas, exigencias, emplazamientos a huelga y paros locos. Pese a los llamados que ha hecho para sumarse a la petición de la UABJO ante diputados federales, locales y autoridades educativas, y lograr un mayor presupuesto, tanto el STEUABJO como el STAUO se han empecinado en trastocar la vida universitaria, con el consecuente daño a la comunidad estudiantil, afectada por paros y bloqueos a escuelas y facultades.

La UABJO es un eslabón clave para la gobernabilidad. No es fortuito que muchos actores políticos quieran meter la mano y aprovecharse de la inestabilidad. El pasado miércoles, por ejemplo, un porro, ALDO AQUINO LÓPEZ, salido del Penal de Santa María Ixcotel, apenas dos semanas antes, en donde estuvo recluido por intento de homicidio, juntó a una decena de supuestos miembros de un bloque estudiantil y se dedicó a secuestrar camiones y asaltar a pasajeros y choferes. Intervino la Policía Estatal, lo detuvo, pero jamás fue consignado al Ministerio Público, sino que lo soltaron sin más. Éste es el típico hampón que enarbolando una causa falsa se dedica a delinquir abiertamente, sin que la autoridad intervenga, con el argumento de la autonomía universitaria.

Uno de los látigos que más fustigar a la UABJO son también los caciques. Uno de ellos, ABRAHAM MARTÍNEZ ALAVÉS sigue metiendo las manos, como hace cuarenta años. Figura asimismo, SILVIANO CABRERA GÓMEZ, el cerebro de uno de los nuevos gremios: el Sindicato Universitario de Académicos (SUA) que, coludidos con otros actores de su misma catadura, siguen desquiciando a la institución. Al menos tres males tiene nuestra Máxima Casa de Estudios: sindicatos, porros y caciques. (JPA)