El regreso a clases – Por Samael HERNÁNDEZ RUIZ.
Por Samael HERNÁNDEZ RUIZ
El regreso a clases se realizó finalmente tanto en Chiapas como en Oaxaca, no sin tensiones internas.
En el caso de Chiapas, la división del Bloque Democrático en dos facciones produjo enfrentamientos por lo que la fracción contraria a la actual dirigencia consideró una traición al movimiento democrático.
De acuerdo con la información disponible, las regiones chiapanecas con más posibilidades de conflicto por este retorno a clases son: Selva de Ocosingo, Altos, Frontera Sur, Zoque Itzantún, la Costa Grande y algunos niveles escolares como educación indígena, secundarias técnicas y primarias. En estas regiones y niveles es posible una confrontación entre padres de familia y maestros del bloque democrático.
En el caso de Oaxaca la situación es diferente. En la Sección XXII del SNTE (S22), la diversidad de grupos que operan al interior del sindicato, donde todos se reivindican como democráticos, es más difícil identificar quiénes están a favor del regreso a clases, porque todos declaran estar por la continuidad de la jornada con el paro de actividades y la movilización del cien por ciento de las bases de trabajadores.
No obstante, destacan quienes, sin abandonar el discurso “oficial”, afirman que debe continuarse la lucha contra la reforma educativa con una modalidad diferente, que fue el caso de la UTE o al menos de algunos de sus dirigentes.
Por otra parte, la presión de los padres de familia en un número no determinado, hizo que algunos directores decidieran iniciar actividades en sus escuelas, ante la amenaza de un enfrentamiento directo con los padres de familia y las autoridades locales. Es posible que el desgaste normal de las bases movilizadas por la Sección XXII, la presión de los padres de familia y las discrepancias de algunos grupos con la actual dirigencia, sean la causa del regreso a clases.
Pero se agregan otras dificultades. Por ejemplo, un buen número de maestros y directores, se niegan a participar en los Talleres de Educación Alternativa organizados por ¡la Sección XXII! ¿La razón? Por los descuentos hechos por el IEEPO en sus cheques. En otras palabras, si cumplen o no con la asistencia a los talleres de actualización, eso no los eximirá del descuento.
Será esta la primera vez que un número considerable de maestros no asistirán a una actividad convocada por su dirigencia bajo el llamado “Calendario Escolar Alternativo” debido a los descuentos realizados por la autoridad educativa.
Reina la confusión en la Sección XXII, porque otros maestros sí que asistirán a los talleres de actualización, pero entonces la situación se torna más complicada. Será interesante ver cómo resuelve la actual dirigencia este lío.
Por otra parte es importante destacar que las diferencias entre algunos grupos con la actual dirigencia de la S22, se agudiza ante la proximidad del relevo sindical, que deberá realizarse durante las primeras semanas de octubre, si es que el comité ejecutivo nacional del SNTE así lo considera, pues es dicho comité el que autoriza la publicación de la convocatoria para el congreso seccional.
¿Cuáles son los escenarios más probables para el tema del relevo de la dirigencia de la Sección 22? Se podría decir que tres:
La actual dirigencia de la Sección 22 del SNTE, fue electa en el X Pre-congreso del MDTEO y XXI Congreso Extraordinario de la Sección 22. El primer evento fue realizado del 22 al 26 de septiembre de 2012 y el Congreso Extraordinario el 26 de septiembre de ese mismo año.
Lo anterior significa que el relevo en la S22, se tendría que realizar entre septiembre y octubre de 2016, de acuerdo con lo que establecen los estatutos del SNTE.
Un escenario posible es la publicación de la convocatoria en octubre, para evitar que las protestas de la Sección 22 afecten la toma de posesión de Alejandro Murat a la gubernatura.
La complejidad del proceso de elección de la dirigencia de la S22, hace muy difícil las conjeturas sobre personas específicas, aunque sí es posible aseverar que CODEMO y UTE, son hasta ahora los grupos interno más fuertes de la Sección 22.
Otro escenario posible, aunque ahora menos probable, es el nombramiento de una Comisión Ejecutiva:
Los estatutos del SNTE (arts. 300, 3001 y art. 84 frac. XXIX) prevén que ante una falta grave, que lleve a la suspensión de todos o la mayoría de los miembros de la dirigencia seccional, procede el nombramiento de una Comisión Ejecutiva a cargo del comité ejecutivo nacional del SNTE.
En el caso de Oaxaca, dos de los principales dirigentes están bajo proceso judicial, y bastaría con que algún miembro actual de la S22 o del propio SNTE, señale faltas graves de la mayoría de la actual dirigencia, vinculadas a los hechos en los que se involucra a Rubén Núñez Ginez y a Francisco Villalobos, para que se den las condiciones que configuren lo establecido en el artículo 301 de los estatutos del SNTE.
Esta es una situación que venían trabajando algunos miembros del comité ejecutivo nacional con la participación de algunas expresiones de la Sección 22, al menos desde el mes de febrero de este año de 2016.
Se hablaba entonces de un delegado especial que integraría una mesa de incidencias con los funcionarios del nuevo IEEPO, a los que se agregaría a tres elementos “convenientes” de la S22 y algunos elementos de la Sección 59. El objetivo era resolver los problemas que se le han acumulado a la actual administración del IEEPO y avanzar en la aplicación de la reforma educativa.
Ahora las cosas serían un poco distintas, si bien no se descarta la figura del delegado especial, una comisión ejecutiva tendría dos efectos: inhabilitaría a toda la actual dirigencia de la Sección 22, podría evitar la realización del Pre-congreso al estilo del MDTEO, y lo más importante, le facilitaría las cosas al gobierno electo, quien trataría los asuntos educativos directamente con el SNTE y desde luego con la SEP.
El efecto colateral de este escenario, sería un incremento en la conflictividad de la S22 y significa entonces, abonarle el terreno tanto a MORENA en su estrategia electoral, como a los grupos radicales. El primero tendría no solo votos, sino organizadores para su estructura en Oaxaca y a escala nacional, en tanto que, a los segundos, les engrosaría sus filas.
El tercer escenario es la suspensión indefinida del congreso, acompañada de una radicalización de las movilizaciones de la S22 en octubre, noviembre y principios de diciembre. En ninguno de los escenarios las cosas se ven bien.