Politica de suma cero 

Prevención cero; sólo simulación

gabino

Oaxaca es una de las entidades del país que mayor sismicidad registra. Históricamente nuestra población ha sido devastada por sismos. Una de las fechas emblemáticas fue el 14 de febrero de 1931, que arrasó nuestra capital y hubo cientos de muertos. Quien hizo hincapié en su política de gobierno sobre la prevención de siniestros fue JOSÉ MURAT. Al inicio de su régimen le tocó vivir al menos dos: uno en junio de 1999 y otro, que afectó poblaciones de la Costa y la Sierra Sur, el 29 de septiembre del mismo año. Se crearon Consejos Municipales de Seguridad y se atendió la emergencia, con recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (FONDEN), a los que algunos de sus colaboradores le hincaron el diente.

Netzahualcoyoltl-SalvatierraDe ahí para adelante nadie ha movido un dedo para reactivar dichos consejos o impulsar desde el ejecutivo, reformas a la ley para privilegiar la prevención en casos de desastre. Para el ex gobernador ULISES RUIZ, el tema no tuvo la mayor relevancia. Para el gobierno de GABINO CUÉ, salvo el sismo que afectó de nueva cuenta la costa oaxaqueña, el 20 de marzo de 2011, que representó toda una faramalla de desplazamiento de funcionarios a la zona afectada y los negocios que hiciera con la construcción de vivienda, el ex titular de la Secretaría de las Infraestructuras y Ordenamiento Territorial Sustentable (SINFRA), NETZAHUALCÓYOTL SALVATIERRA, nada hay digno de destacarse.

felipe-reyna-romeroHoy se cumplen 31 años de aquel sismo de más de 7 grados en la Escala de Richeter, que devastó la ciudad de México. Se estima que más de diez mil personas perdieron la vida, pero hubo muchos miles de desaparecidos. Fue una dura lección para mostrarnos nuestra vulnerabilidad ante casos de desastre. Durante mucho tiempo, la CDMX lloró a sus muertos. Hubo actos heroicos de solidaridad; de fervor cívico desbordado, que rebasó en mucho la capacidad del gobierno federal y de la Jefatura de Gobierno en el entonces Distrito Federal.

El éxodo hacia el interior del país fue relativo no obstante la aprensiva campaña de la Federación para despresurizar la capital de la República. Pese a todo ello y a la constante actividad sísmica que vivimos en Oaxaca, no existe de parte de las autoridades, una política de prevención o de qué hacer en casos de siniestro. El Instituto Estatal de Protección Civil (IEPC) a cargo de FELIPE REYNA ROMERO, con certeza, no tiene ni el presupuesto ni el apoyo institucional para fomentar en la sociedad civil, las medidas precautorias para hacer frente a los desastres naturales. (JPA)

 

Leave a Comment