PANAL, PRS y PSDO: Simples franquicias

El Partido Nueva Alianza (Panal), una franquicia que regentea a placer en Oaxaca, BERSAÍN LÓPEZ, anunció hace un par de días que va solo en las elecciones de junio. En un principio se dijo que seguramente participaría en coalición con el PRI-PVEM, sin embargo, poco tiene que aportar y seguramente le apostaba a su supervivencia coaligado. El dirigente –o más bien administrador de la franquicia- sostuvo que su partido va solo en el caso de los diputados locales y presidencias municipales y presentó algunos de sus aspirantes: ANA MARTHA JUÁREZ DÍAZ, MARCELA CHÁVEZ GONZÁLEZ, ERICK MALDONADO DOMÍNGUEZ, SOFÍA GUADALUPE VALDIVIA MARTÍNEZ y ANAYANSI BRAVO URQUIDI. La presencia del PANAL en la entidad es más bien simbólica. Nada de qué sorprenderse.

Hace unos meses, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), falló a favor del llamado Consejo Indígena del Sureste, regenteado por JOAQUÍN RUIZ SALAZAR, quien acabó de convertirlo en partido político –el Partido Renovación Social (PRS)-, con el ardid de que se trata de un instituto político con esencia indígena, cuestión que ya olvidó por completo su franquicitario. Apenas el viernes se anunció que dicho membrete –porque eso es y nada más- arroparía las aspiraciones de BENJAMÍN ROBLES MONTOYA, ante la negativa del PRD de registrarlo. Esta situación tiene trasfondo, que no es precisamente beneficiar al senador chilango sino meterlo en un callejón sin salida.

Nada se sabe a la fecha de otra franquicia, creada con el mismo argumento: un partido emanado de la necesidad de los indígenas de tener un organismo representativo. Nos referimos al Partido Socialdemócrata de Oaxaca (PSDO), “propiedad” del actual diputado local, MANUEL PÉREZ MORALES. Con certeza está a la caza de alguno de los ungidos como candidatos para apoyarlo “de facto”, habida cuenta de que no se ubica en este momento en ninguna de las coaliciones registradas ante el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (IEEPCO). Tampoco ha trascendido alguna información relevante del Partido Unidad Popular (PUP), herencia del desaparecido HERIBERTO PAZOS ORTIZ a URIEL DÍAZ CABALLERO. El quid de los partidos citados es uno: el oportunismo electorero. Algo que les dé nuevos aires para poder seguir medrando de las prerrogativas, que sólo sirven para alimentar el ego y la voracidad de sus propietarios y sus incondicionales. Pero ni militancia ni plataforma política, menos declaración de principios. Son puro membrete. (JPA)