Nada de Educación: Puras prebendas

Un análisis del pliego de temas que trataría la disidente Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), con la participación de la Sección 22, con el Secretario de Gobernación, MIGUEL ÁNGEL OSORIO CHONG y el Subsecretario de Enlace Legislativo, que fue quien le dio vida de nueva cuenta a la CNTE, LUIS ENRIQUE MIRANDA, ayer por la tarde, reveló que la educación es lo que menos importa a dicha organización, sino solamente la certeza de su empleo y la conservación de sus cotos de poder y privilegios, como las plazas automáticas para los egresados de las 11 normales, cese a los despidos y agilización de trámites para pagos.

La parte política no sorprendió a nadie: la añeja y sobada petición de “presos políticos libertad”. Lo cierto es que cada vez asoma más la manipulación de la CNTE por diversos intereses políticos; la intromisión de los grupos criminales, la guerrilla y hasta empresarios. Desde el lunes trascendió que habría arribado a la capital oaxaqueña, un grupo especial de inteligencia de la Policía Federal y, posiblemente, Policía Militar, para investigar a fondo los nexos, fuentes de financiamiento y otros, que han permitido armar a sujetos que atacaron armados a la corporación y provocaron las muertes que ahora les achacan.

Según fuentes policiales, ha llamado la atención el silencio del ex candidato a la gubernatura por el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), SALOMÓN JARA CRUZ, que previo a los disturbios, estuvo cuestionando el resultado de la elección del 5 de junio e incluso convocando a marchas y movilizaciones. Cuando la situación del magisterio “se calentó”, JARA simplemente se perdió en la nebulosa. Uno más, es aquel candidato que ha estado ligado con grupos como CODEP de ALEJANDRO MARTÍNEZ, FALP –a través de su seguidor y socio, JESÚS LÓPEZ RODRÍGUEZ- y COMUNA, con FLAVIO SOSA, que llamó con insistencia a la “revolución de la gente”. Nos referimos a BENJAMÍN ROBLES MONTOYA.

No hay que olvidar que de los ocho muertos reconocidos de manera oficial, ninguno es maestro afiliado al Cártel-22. Todos son vecinos, comuneros o militantes de ciertas organizaciones, que llegaron a apoyar a los maestros de manera espontánea, mismos que fueron llevados al sacrificio por una causa ajena a la suya. Tampoco se ignora que los grupos que se mueven detrás de la CNTE, buscan afanosamente víctimas mortales para asumirse públicamente como mártires. Los muertos son su arma para negociar; el instrumento para atraer los reflectores. Desafortunadamente con ello engañan y sorprenden a los medios nacionales e internacionales y hasta líderes de opinión, caen en la trampa. (JPA)