LXII Legislatura: Por la puerta trasera

RAÚL NATHÁN PÉREZ

1).- Una legislatura ad hoc

En dos semanas termina su gestión la LXII Legislatura. Es penoso reconocerlo pero, salvo contadísimas excepciones en el quehacer de sus legisladores, se perfiló como la peor de la historia política de Oaxaca. La más onerosa, la más improductiva, la menos transparente. Así la han calificado. No es una fijación personal. Un presupuesto anual de 600 millones -1 mil 800 millones en tres años- fue inversamente proporcional a su deplorable gestión. Ninguno de los que manejaron la lana, como presidentes de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), ha rendido cuentas. Ni lo hará. La Cámara local aprobó la ley que crea el Instituto de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (IAIP) –antes COTAIPO- y sus miembros. Pero que no les pidan cuentas. Es decir, “en casa de herrero, cuchillo de palo”. Un poder legislativo que se mantuvo más allá del bien y del mal. Sólo se salvaron algunos partidos pequeños, como MC o PT, que presumimos, actuaron con prudencia en su estancia en la referida diputación local.

Algunos diputados se irán a seguir echando la hueva a sus municipios, aunque no sean originarios de ahí. Fredy Gil Pineda, por ejemplo, conocido en sus tiempos de porro de la UABJO, como “El Malvavisco”, que se agenció San Pedro Mixtepec, cuando antes fue edil de Santos Reyes Nopala, en donde creó una policía comunitaria, imitando a las de Michoacán. En algunas sesiones llevaba su aparato de sonido, para reventarlas con el ruido. Ocupó la curul para echar desmadre. Otro: Gustavo Díaz Sánchez, conocido como “El Gato”, es ya flamante edil de Cosolapa o Arsenio Mejía, que no  cuajó la presidencia de Santiago Juxtlahuaca. Todos ellos fueron emblemáticos y golpeadores, incapaces de proponer una iniciativa seria. Fueron el bronx de la bancada del PRI.

2).- La danza perredista

El único que se mantuvo de principio a fin fue Alejandro Avilés, coordinador de la diputación priista. Con habilidad inusual movía los hilos, incluso de otros partidos. Denostado por muchos y reconocido por otros, su habilidad política no es puesta en tela de juicio. El PRD fue una calamidad. Inició como coordinador, Anselmo Ortiz, ya desaparecido, pero fue removido para darle entrada a Félix Antonio Serrano Toledo, hoy munícipe electo de Ciudad Ixtepec. Éste no se allanó, junto con su hermano Rosendo, ambos del grupo de “Los Chendos”, a la decisión de imponer a José Antonio Estefan Garfias, en el distrito electoral federal de Tehuantepec. De facto apoyaron a Pastor Girón, del Partido Encuentro Social (PES). Sin decirle agua va, el PRD, entonces dirigido por Carol Altamirano lo relevó. Impuso a Jesús López Rodríguez.

Pero el remedio resultó peor que le enfermedad. No sólo torpedeó al PRD sino que se la jugó abiertamente con el PT, que llevaba como candidato a la gubernatura a Benjamín Robles. Coqueteó con Morena. En el ínterin, hizo lo que le vino en gana con los 600 millones que manejó. La nómina del Frente Amplio de Lucha Popular (FALP), que le arrebató a su antiguo socio: Carlos Aguilar Castellanos, a) El Chino Mugre, la pagó el Congreso. De la noche a la mañana devino de “luchador social” a secas, a potentado de Santiago Apoala, su tierra natal. Aunque en el PRD fue catalogado como traidor, no dejó la coordinación, la cual se definió a favor de Juanita Cruz, justo cuando el presidente nacional del PRD, Agustín Basave, dejaba el cargo. Y ahí se mantiene Chucho Falp, en sus últimos días como legislador, jugando al gato y al ratón. Fue de todos sus compañeros presidentes de la Jucopo, el más vil y el más opaco.

2).- El PAN: Entrampado

En noviembre de 2015, la ejuteca Antonia Natividad Díaz Jiménez fue elegida presidenta de la JUCOPO. La legisladora había ya madurado. Sabía de la cloaca que había en el manejo de los recursos y prometió la realización de auditorías. Nada ocurrió. Cayó en el juego. Y operó al tenor de la presidencia del Comité Directivo del PAN. La jugada era simple: el actual dirigente, Juan Mendoza Reyes sería el nuevo pastor de la bancada panista. La diputada Naty sería la presidenta del PAN. Una regla matemática simple. “Quítate tú para ponerme yo” –como aquel ritmo de salsa-. Pero les falló el tiro. La actual legislatura aprobó una reforma a la Ley Orgánica del Congreso, en la que para hacer bancada se requieren al menos cinco diputados. El PAN no los tiene. Carol, que fue apoyado por el blanquiazul en su candidatura por Salina Cruz, regresó al PRD. Antes de concluir su gestión, que le brincan a Naty sus colegas panistas. La relevaron. Dejaron como coordinador a Gerardo García Henestroza, que sólo le toca manejar las miserias que le dejaron los de atrás.

BREVES DE LA GRILLA LOCAL:

— Algo tienen que hacer el gobierno entrante y la LXIII Legislatura. Oaxaca no puede seguir siendo rehén de bloqueos y chantaje. Quien sea y por los motivos que sean, jamás podremos salir del marasmo, estando la ciudadanía como la semana pasada. Ya paren al enfermero, Mario Félix, a los locos de Mixtequilla y otros.

— Consulte nuestra página: www.oaxpress.info y www.facebook.com/oaxpress

Twitter: nathanoax