¿Cuál Derecho a la Educación?
La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y su enclave estatal, la Sección 22, en abierto desafío al Estado Mexicano, al pueblo oaxaqueño e incluso, a los llamados del Poder Legislativo y la misma Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), decidió en la mayoría de las escuelas que controla, no iniciar el ciclo escolar. Este hecho, que representa un atentado en contra del Derecho a la Educación, reconocido como un derecho humano inalenable; una afrenta a la niñez, que los organismos internacionales como la ONU y su filial, la UNICEF reconocen como el sector más vulnerable de la población, merece castigo.
No esperemos, sin embargo, la esperada aplicación de la ley por parte de las autoridades o el uso de la fuerza pública, por parte de la Federación. Ese no será, lamentablemente, el papel que asuma este gobierno blandengue y complaciente. El castigo a la CNTE/Sección 22, se lo ha impuesto una sociedad civil harta de abusos; se lo ha impuesto una sociedad exhausta, que ha visto al maestro como vende-patrias, enemigo de la educación y de la niñez; el representante genuino de la mediocridad y la demagogia; de la doble cara y la máscara revolucionaria.
Diversos organismos civiles, de manera emblemática, “Mexicanos Primero”, que preside CLAUDIO X. GONZÁLEZ, ha dado la batalla para hacer consciencia respecto al daño tan grave que el magisterio disidente ha hecho a la educación. Ha predicado en el desierto. Ni MIGUEL ÁNGEL OSORIO CHONG, titular de la Secretaría de Gobernación (SEGOB) ni AURELIO NUÑO, de Educación Pública (SEP), mucho menos la Comisión Nacional Representativa de la CNTE, ha acusado recibo. Por supuesto, la última lo ve como enemigo.
El gobierno de GABINO CUÉ, también ha nadado de muertito. Teniendo una dependencia, la Secretaría General de Gobierno, que encabeza CARLOS SANTIAGO CARRASCO, que puede intervenir con los presidentes municipales en torno al regreso a clases, simplemente se ha encogido de hombros. Esto es, hay que dejar que sea el gobierno federal el que resuelva los entuertos. Por ello dicen que los tres meses que faltan serán inéditos: cualquiera podrá hacer lo que le plazca. No hay Estado, no hay Policía, no hay gobierno. ¡Viva la anarquía!
La esperanza de acotar la amenaza de la CNTE/Sección 22; la urgente protección de los niños en este atentado al Derecho a la Educación, está en los presidentes municipales concientes y en los padres de familia. Sin duda alguna, los maestros pseudo revolucionarios merecen una lección ante este crimen de lesa humanidad. (JPA)