El comentario de hoy, martes 15 de noviembre 2022
Hace una semana, en este espacio nos congratulamos del anuncio de la adquisición de un predio para el depósito de los desechos orgánicos que se generan en la capital. Hoy sabemos que no hay tal y que la crisis sigue lacerando con mayor dureza a la población, poniendo en tela de juicio el perfil político que la misma ha alcanzado. En efecto, ya no es sólo la torpeza con la que el ayuntamiento capitalino ha manejado el problema, sino el aprovechamiento del mismo por intereses políticos.
Vayamos por partes. Todo lo que ha hecho el gobierno municipal a la fecha, han sido sólo palos de ciego. Primero fue habilitar un espacio por el Río Salado, que a poco rebasó su capacidad. Luego el intento de vaciar los camiones recolectores en un paraje ubicado en el Valle de Etla, que motivó retención de una concejal y al menos 10 vehículos. Finalmente fue arrojar los desechos en el predio de la antigua fábrica de Triplay de Oaxaca. Y se desató un infierno de protestas, manejadas por con un avieso propósito político.
Es evidente el manoseo y la manipulación. La crisis de la basura que hemos vivido, no es la misma de hace un mes. La problemática se ha exacerbado, dejando un nicho vacío que pretenden aprovechar algunos vivales. Por otra parte, se advierte asimismo, un golpeteo al gobierno municipal, huérfano de negociadores y de actores que conocen el teje y maneje. Dicen algunos que de plano el edil y su equipo no se dejan ayudar. Y puede que haya algo de razón. El problema tal vez ya se hubiera resuelto. Pero no.
Otro factor es la falta de solidaridad de los municipios gobernados por el mismo partido que la capital. Incluso de las agencias municipales. Alguien me hizo la reflexión de que nadie quiere tener cerca su propia basura. Es el caso de algunos ciudadanos de San Juan Chapultepec, que laboran o tienen sus negocios en el Mercado de Abasto, que es donde se generan cientos de toneladas de desechos. Pero tampoco quisieron el basurero emergente frente a su agencia. Entonces, ¿cuál es la alternativa que proponen? Diversas voces se han elevado para exigir que el manejo de la basura se privatice, como lo hacen las capitales más importantes del país. Obvio, sería la alternativa más viable. Quitarles banderas a algunos líderes sin escúpulos. Sin embargo, ya veremos a los sindicatos prestos para arremeter, boicotear o bloquear. Se han arraigado tanto los vicios en dichos gremios que el solo hecho de quitarles el negocio, sería prácticamente un suicidio político para quien tome la decisión. Pero, el tiempo apremia una solución. (JPA)